HORIZONTE RECORRIENDO OTROS BARRIOS DEL MUNDO

Horizonte, la Revista de Caballito salió a conocer otros barrios.

Alejados, con otras veredas y otras realidades. Diferentes olores, sonidos, colores y sabores.

Encontramos un factor común: los plátanos. Con sus troncos grises salpicados de ocre y sus típicas hojas. Con sus semillas cubriendo las veredas, para anunciar la primavera.

Otros barrios sin pintadas ni grafittis en las paredes. Sin basura en las calles. Con esa pulcritud que sólo da el respeto por el otro y, que nos parece anormal.

Y en esos barrios extraños por extranjeros y lejanos se vieron las tapas de Horizonte. Un recorrido donde descubrimos que existe un mundo distinto, ni mejor, ni peor: distinto. Y para acceder a él, no se necesita dinero. Tan sólo educación y respeto. Educación que no se enseña en una escuela, sino en el hogar. Respeto que no se aprende, se ejercita.

Horizonte estuvo allí y ya regresó. Con la alegría de volver al barrio. A esos colores, olores y sonidos primigenios. A los rostros conocidos. A la tibieza de la amistad sincera.

En este recorrido por otros barrios, de otras ciudades, de otros países, surgió, aunque uno no se lo propusiera la comparación, y encontramos similitudes y diferencias, cosas mejores y cosas peores.

Encontramos ciudades limpias, sin papeles en las veredas, ni en los andenes del subte. Paredes sin pintadas ni afiches pegados en propiedades privadas (a pesar de estar en período electoral), en algunas ciudades vimos ceniceros en las veredas para no tirar colillas al piso.

Encontramos cosas que nos sorprendieron, como ver que se viaja con perros en el subte o que se permite entrar con mascotas a algunos lugares de comidas (ej.: Mc Donald).  Las redes de subte son increíbles, se puede llegar por ese medio a cualquier parte de la ciudad. Observamos también como cuidan, respetan y mantienen sus tradiciones y su cultura. Siempre tienen presente un buen día,  gracias, por favor, perdón.  Nos llamó la atención los cuervos y las ardillas en las plazas.

Igual que acá, los empleados salen a fumar a la vereda, se toma mucha cerveza, hay gorriones y plátanos. Todos suelen ser muy amables con los extranjeros (quizás un poco menos en París). Las verduras y hortalizas no son tan sabrosas y coloridas como las nuestras y la famosa baguette es puro cuento.

Llama la atención ver, en diferentes ciudades, baños públicos en las veredas, a los que se puede acceder colocando una moneda que otorga el derecho a uso por 15 o 20 minutos.

Vimos también bicicletas colocadas por la Municipalidad,el gran problema de tránsito está en todos lados.

En todas las ciudades que visitamos, aunque con algunas variaciones, encontramos mucha población de origen extranjero: de países de Europa del Este, chinos, orientales de otros países, africanos, árabes, hindúes, afganos, pakistanies y sudamericanos, estos últimos, mayoritariamente en España y procedentes de Ecuador, Colombia, Bolivia y Venezuela.  Conversando con madrileños, nos aclararon que ellos llaman sudakas a los sudamericanos excluyendo a los chilenos, argentinos y uruguayos.

No encontramos medios barriales de distribución gratuita, sí medios grandes (similares a La Razón de aquí).

En fin, fueron unas vacaciones, un período de descanso y también un tiempo destinado a la recuperación después de haber pasado algún problema de salud más o menos serio.

Horizonte estuvo en otros barrios, y quiere compartirlos con ustedes.