Veintiún años de trayectoria y un reconocimiento más para “Horizonte, la Revista de Caballito”.
Sin embargo no es para mí solo un premio más. Este tiene un valor especial, ya que fue otorgado por el Rotary Club de Caballito, una de las instituciones que más trabaja por el barrio, y muchas veces en silencio.
Cuando nuestra publicación recién comenzaba, y todo era más difícil, el primer reconocimiento que recibimos fue otorgada ni más ni menos que por el Rotary Club. Por aquel entonces el premio se llamaba “Caballito de Plata” y la institución lo otorgaba por primera vez.
Por eso, quiero escribir esta breve crónica en primera persona. Porque quiero compartir con amigos, vecinos, lectores, la alegría que significa este premio que es un mimo para el alma y que me muestra que una esta en el camino correcto.
Al recibir está distinción, no dudé en agradecer en primer término a los amigos rotarios por valorar el trabajo realizado. Por otra parte, no pude dejar de referirme al compromiso que es hacer un medio barrial, donde se cumplen múltiples tareas, donde una es a la vez directora y cadeta, periodista y fotógrafa, diagramadora y diseñadora.
También hubo un párrafo especial para destacar la importancia del marco elegido para este evento, ya que hay una vinculación de muchos años con el Colegio Marianista, donde estudiaron mis hermanos y mis hijos, donde tomé mi Primera Comunión.
No pude evitar emocionarme al recordar al profesor y periodista Juan Carlos Pissano, quien dio clases en esta casa de estudios, y también fue docente en el Círculo de la Prensa, donde cursé mis estudios de periodismo y fue quien me orientó en mis inicios con la publicación que actualmente dirijo.
Mencioné también que muchos de los premiados fueron en diferentes momentos notas de la Revista Horizonte. Hubo palabras para recordar la tarea que llevó adelante el Ministro Guillermo Montenegro para erradicar dos asentamientos que había en el barrio. Por otra parte, también acompañamos la instalación de nueva base del SAME, que dirige el Dr. Alberto Crescenti y que funciona en Yerbal al 700. El maestro Otilio Otorga fue protagonista de una nota dedicada a su trayectoria, lo mismo que Carlos Timoteo Griguol.
Verdaderamente, un lujo y un honor para mi haber sido premiada junto a semejantes figuras.
Un honor también haber compartido la entrega de este reconocimiento con Arnaldo Omar Goenaga, con quien llevamos adelante el compromiso de hacer periodismo barrial en Caballito.
Fue sin duda una noche de mucha emoción, acompañada por mi hijo, Rolando, quien actualmente está colaborando con Horizonte, a la vez que está iniciando su propia publicación. Y un gracias especial a mi mamá, que, como siempre estuvo acompañándome desde las primeras filas.
Solo faltaba Héctor, mi compañero de ruta, aunque yo lo sentí a mi lado.
Mil gracias también a todos los amigos incondicionales que se acercaron a compartir esta fiesta conmigo.
Finalmente mis felicitaciones a los rotarios por tantos logros realizados y por haberme tenido en cuenta a la hora de elegir a los galardonados.
Este premio no hace más que reafirmar mi compromiso para seguir siempre en este camino trabajando cada vez más, con más fuerza y ahinco por mi Caballito querido.
Marina Inés Bussio
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